lunes, 16 de marzo de 2009

amor


Tu sed transustancia mi sudoren vino que bebemos en cada beso.Tus pies no se hundenen los lagos de mis lágrimas.Tu saliva siembra la luzen la noche de mis ojos.Tu voz resucita mis músculos dormidosmis latidos sepultados.Tus manos, cuando me tocan, curanmis heridas más invisibles.Tu hambre fecunda pecesque se multiplican como deseos de humedaden el múltiple pan de mi cuerpo.Cada vez que me amas,es un milagro.